No lo sabían
Reían y jugaban sin saber que los sauces lloraban.
Y sin saber el motivo de sus risas, reían. Y sin saber el
motivo de sus juegos, jugaban.
Se abrazaban, sonreían, disfrutaban.
Y los sauces las veían.
Y sin tener ningún camino, caminaban. Y sin tener ninguna
meta, corrían.
Los sauces lloraban y ellas no lo sabían.
Y mientras tanto, soñaban. Y mientras tanto, seguían.
Y los sauces lo sabían.
Bailaban, cantaban, reían.
Y los sauces seguían llorando.
Pero las niñas... no lo sabían.
11 septiembre 2012